La seguridad de las transacciones es uno de los principales problemas que surgen al discutir el comercio mayorista, la importación y la exportación. Las expectativas del comprador son más probables que sean comparables a las del mercado de B2C: haces un pedido, lo pagas, y después esperas la entrega de la mercancía. Si algo sale mal, no estas preocupado porque las transacciones están aseguradas por los proveedores de pago.
Sin embargo, tenemos que tener en cuenta que el comercio al por mayor es diferente. El valor medio de la transacción es muchas veces superior al del mercado minorista. Además, en el sector B2B no se aplican las leyes de protección al consumidor porque ... no hay consumidores en ella. La esencia de la venta al por mayor no es comprar para tus propias necesidades, si no con la intención de la reventa.
Entonces, ¿cómo garantizar la seguridad de la transacción?
Pide muestras
Al comprar a fabricantes y distribuidores, hay generalmente una opción para pedir las muestras de los productos. Esto no es una inversión grande, mientras que te permite pre-evaluar la calidad de los bienes y su potencial para la reventa. Realmente vale la pena preguntar acerca de esta opción, especialmente si tienes en mente la compra de un gran lote o stock.
Recoge en persona y inspecciona de las mercancías
Gran parte de los negocios mayoristas y B2B sigue teniendo lugar cara a cara, principalmente debido a las diferencias antes mencionadas entre comercio al por mayor y al por menor. Ver los productos en la tienda, almacén del distribuidor o sala de exposición a menudo ayuda a evitar malentendidos y dudas sobre su condición y calidad.
Carta de crédito
Esta es una solución recomendada especialmente en comercio exterior, importación. La transacción está garantizada por un banco fiduciario que se convierte en parte en el acuerdo comercial. Normalmente, se basa en un acuerdo contractual que define claramente las obligaciones del comprador y el vendedor. El importador deposita los fondos en el banco, y el exportador los recibe sólo si cumple el contrato. Por lo tanto, la carta de crédito asegura a ambas partes en la transacción: el importador, en caso de problemas con la mercancía y la entrega; Y el exportador, en caso de insolvencia del comprador.
Los métodos anteriores aumentan significativamente la seguridad de la importación y exportación, así como el comercio al por mayor. En la próxima transacción, por lo tanto, vale la pena preguntar al vendedor si ofrece este tipo de posibilidades y utilizarlas.
